61 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Yo les agradezco por estar reunido. Yo, su Madre María, sé que para algunos de mis niños esto es difícil de creer, porque están limitados por su falta de fe. Deben saber que su Padre del Cielo los creó por Amor y para ser queridos por Él.

No procuren comprender lo que es divino porque ustedes son incapaces para esto. Recuerden solamente que su Padre del Cielo es el Creador de todas las cosas. Ustedes se apoyan en su propias fuerzas, mis niños, y ustedes viven en la ilusión que ustedes mismos pueden cumplir todo. Comprendan que sin su Creador, nada sobre esta tierra puede tomar vida.

Hoy, su Padre del Cielo les da el Don del Corazón Acogedor de su Hijo para enseñarles y hacerles apreciar y respetar la Vida, porque hasta una brizna de hierba tiene importancia. Sirven para algo esta brizna de hierba, mis niños.

Todos los árboles purifican su aire, son esenciales para sus vidas. Todos los animales han sido creados para su supervivencia. Ellos también son criaturas de su Padre del Cielo. Ustedes no respetan más la vida mis niños, y ustedes tendrán que sufrir de eso muchísimo. ¿ Todo lo que su Padre del Cielo creó, lo creó en la armonía y en la paz, y ustedes, que hacen, mis niños? Ustedes envenenan todos los ríos con su productos químicos, usted matan a los árboles. Comprendan mis niños, que sin estos árboles ustedes no podrán respirar. Ellos son los pulmones de su planeta, de su tierra.

Todo esto, ustedes lo hace en nombre del dinero. Ustedes se hicieron unos consumidores compulsivos. Ustedes no necesitan tanto material para vivir. La tierra esta contaminada. ¿ Que van a hacer? Sus suelos son cada vez más empobrecidos. Ustedes perdieron el verdadero sentido práctico de la vida.

Comprenda mis niños, y comprendan que cuanto más ustedes tienen curas médicas, más usted tiene enfermos. Su ciencia esta adelantada, pero esto no detiene el flujo de las epidemias. Les suplico, mis niños, recen con todo su corazón para que su Padre del Cielo detenga a todas estas plagas y a todos sus malas costumbres de consumo.

Muchos de mis chicos no conocen más la importancia de ir a caminar en los bosques. Viven en el hormiguero, viven delante de su ordenador. Mis niños no están más en contacto con todo lo que los lleva la vida.

Tienen todo para ser feliz, pero sin embargo son desgraciados. USTEDES DEBEN REGRESAR HACIA LA NATURALEZA, mis niños. Ustedes deben aprender a gustar de la naturaleza y a respetarla. Comprendan que si esta naturaleza muere, ustedes también morirán; y si nada puede sobrevivir sobre esta tierra, esto será imposible para que ustedes vivan allí. Esto es simple comprender.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger la Omnipotencia de Luz que echa todas las tinieblas.

Vean, mis niños, todo lo que se vive al nivel de las industrias y al nivel de todos pueblos. Si no dejan de contaminar la tierra, pronto ustedes estarán en un punto sin retorno. Comprendan a mis niños, que ustedes no están hechos para vivir en el químico y para comer alimentos desnaturalizados. Comprendan que esto tiene un impacto sobre su cuerpo físico y sobre sus espíritus. Les suplico, acepten cambiar su vida, acepten cambiar sus costumbres. Regresen hacia los campos.

Usted invierten mucho para el dinero y no para la supervivencia de esta humanidad. Pronto ustedes comprenderán el sentido de mis palabras.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias de Protección sobre toda tu Creación.

Todos ustedes que estan unidos con Corazón Acogedor de mi Hijo, alábenlo con todo su corazón, porque su Amor es inagotable. Muchos de mis niños se convertirán. Gracias de salvación, de liberación y de curación les serán concedidas porque por estas gracias desea afirmar su fe.

Bendito sea el que viene en nombre del Señor.

Y yo los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

62 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Yo les agradezco por estar reunidos y por unirse con la Omnipotencia Eucarística de mi Hijo Bien Amado. Oh Cristo resucitado, ven para hacer vivir el mismo Espíritu en todo el ser de tus niños.

Muchos de mis niños no rezan cuándo todo está bien en su vida y cuando llega el tiempo de la prueba, les faltan fuerza. Comprendan que ustedes no deben esperar cuando todo anda mal para rezar. Sus vidas deben ser una oración y una ofrenda. Ustedes deben ofrecerle todo a Dios. Lo que a su Padre del Cielo le gusta es su abandono y la confianza que ustedes le hacen. Mis niños, ustedes deben aprender a gustar. Comprendan que el amor es una fuerza que viene del corazón para estar al servicio de sus hermanos y hermanas.

Mis niños, su amor esta condicionado a su orgullo y a sus malas costumbres. Fácilmente les gusta cuando nada los contraria. Su amor es mas bien un amor egoísta y por esto es que ustedes hacen sufrir a su prójimo. Ustedes viven en los falsos valores y este modo de vivir los arrastra hacia el abismo del pecado.

Comprendan mis niños, que ustedes son unos niños de Dios y que el tiempo vino para ustedes para madurar espiritualmente. Ustedes deben a vivir dentro de las profundidades de sus corazón. Ustedes sufrirán al tamaño de sus orgullo. Ustedes están muy lejos de todo lo que mi Hijo les enseñó. En nombre del orgullo y en nombre del dinero, ustedes se suprimen. Les suplico, regresen hacia la oración y consienta a hacer este lazo con su Padre del Cielo en su corazón, con el fin de que puedan aportarles las luces necesarias para que ustedes encuentren su camino.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias del Espíritu Santo en cada uno de tus niños. Ven para alumbrar sus caminos para que puedan vivir en la Verdad.

¡ Reflexionen, mis niños! No olviden que un día ustedes estarán frente a su Creador. Ustedes no podrán aportarle nada de ustedes. Les suplico, acepten abrir sus corazones porque no hay otro medio para recibir las gracias. Su Padre del Cielo no fuerza a sus niños que lo amen: los creó libres. " Pidan y ustedes recibirán ", (Mt 7,7) No se apoyen es ustedes mismos, porque esto sería un gran error para ustedes.

Hago descender sobre ustedes Toda la Potencia de Gracias de Bendiciones del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

63 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Le agradezco por todo el amor que ustedes me llevan. Les agradezco por unirse así en el corazón de mi Hijo.

Mis niños, todos ustedes llevan, en su corazón, el germen del deseo del Cielo, pero ustedes no son conscientes de esto. Cuando ustedes encuentra a uno de su hermanos que le habla de Dios, sobre su camino, y que ustedes sienten algo que se mueva en su corazón, ustedes se dice interiormente: " yo también yo quiero a Dios, pero no lo sabía. Yo también llevo el Amor del Cristo en mí. Lo sentí a través de las palabras de mi hermano. " Varios de ustedes buscan un rincón del Cielo, a través de sus sufrimientos. Si ustedes le preguntan a uno de su hermanos que son dependientes de la droga o de la bebida: " ¿ que buscas en este efecto? " Les responderán: " busco un cierto paraíso. "

No olvide a mis niños, que nadie puede apagar el germen de su bautismo. Está siempre allí bajo las brasas de su corazón. Espera sólo ser encendido. Les suplico mis niños, no emitan juicios. Rueguen y recen por todos los que sufren. No olviden que el Espíritu Santo habita en cada una de sus palabras para encender el fuego de su bautismo, en el corazón de sus hermanos y hermanas.

Vengan sin cesar para sacar de la fuente de la Acogida de mi Hijo, Él que viene acogerlos a todo para ustedes, Él que viene para transformar sus sufrimientos en Amor, en Paz y en Misericordia. ¿ Cuántos de ustedes buscan la paz pero no pueden encontrarla? Mis niños sean sinceros en sus corazones, cuantos buscan esta paz, este amor, pero muchos de ellos son desviados y cogidos en la trampa por mi adversario. Comprendan que necesitan ser ayudados. No necesitan sus juicios, su cruz es ya muy pesada.

Mis niños, cuando ustedes tienen que llevar la cruz y cuando ustedes son sostenidos por la gracia, comprenden que esto les aporta mucha fuerza para perseguir sus caminos y atravesar las pruebas. Les suplico, mis niños, no juzguen a su prójimo.

Pidan la gracia ser sólo amor y acogida para todos sus hermanos y hermanas. Esto es simple mis niños. ¿Por qué agravan su cruz con sus juicios y por sus faltas de caridad, ustedes recibieron tanto de la Misericordia, ustedes están sostenidos por la gracia? Les suplico, recen y recen por sus almas. Les suplico con todo mi Corazón, porque muchas almas serán salvadas gracias a sus oraciones.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tus Totales Potencias de Gracias de Fuerza para todas las almas que viven en el combate de las tinieblas para que puedan ascender a tu Reino.

Comprendan mis niños, que su Padre del Cielo es el Amor Puro. Les regaló a su Hijo, para que ustedes pudieran acoger todo. Les suplico, mis niños, acojan todos los sufrimientos de las almas en sus oraciones y en el Corazón de mi Hijo para que les sea revelado el Amor de Dios su Padre. En su gran Misericordia, desea que ninguno de sus niños se pierda.

Mis niños, Yo les pido rezar por las almas agonizantes, por todos los niños que han sido abortados. Recen por mis intenciones, de ese modo no tendrán ustedes más tiempo para juzgar.

Vean la gracia de su Misericordia, mis niños, y a través del Corazón Acogedor de mi Hijo, " pidan y ustedes recibirán, golpeen y les abriremos ". (Mt 7,7) Alaben al Señor con todo su corazón, para el lugar donde ha nacido, porque muchos países son invadidos por las tinieblas. Alaben al Señor con todo su corazón, para Toda la Potencia de Gracias de su Reino. Les suplico, mis niños, hagan saber sobre el Corazón Acogedor de mi Hijo.

Viene hoy, a través de su Corazón Acogedor, a resucitarlos de todas sus tinieblas. Yo, su Madre del Cielo, se los digo, a todos mis niños de la tierra: " No tengan miedo, regresan hacia la oración, porque a través de su oraciones ustedes obtendrán todas las gracias y las fuerzas necesarias para vivir este tiempo de purificación. " Su Padre no los deja sólo en este tiempo de prueba y de purificación. ¡ Qué la imagen del Corazón Acogedor de mi Hijo sea conocida sobre toda la tierra! Es una gran protección para mis niños.

Sírvansen también ustedes de las armas espirituales que son: la Omnipotencia Eucarística de mi Hijo, la Omnipotencia de su Protección, su Omnipotencia de Discernimiento, de Liberación, de Salvación, de Paz, de la Verdad, su Omnipotencia de gracia de Prudencia, su Omnipotencia de gracia de Sabiduría, la Omnipotencia de gracias de sus Sacramentos, sus Totales Potencias de gracias de Conversión y de Curación para que a través de su Acogida que es Pura, pueda acoger a cada uno de sus niños, Toda la Potencia de Dios nuestro Padre en este tiempo de pruebas y de sufrimientos.

En este gran combate, les aporta las armas necesarias para vencer las fuerzas del mal. Mediten estas palabras en su corazón. ¡ Les suplico! Regresen a la oración. Desciendan en sus corazones.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias de tu Espíritu Santo de la Verdad en cada uno de nosotros.

Les suplico, mis niños, hagan conocer el Corazón Acogedor de mi Hijo a todos los pueblos de la tierra.

Hago bajar sobre ustedes la Bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

64 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Oración de la Virgen María: padre de las Luces, te agradecemos por todo lo que les concedes a tus niños, ellos mismo no pueden ver todas estas gracias. Muy a menudo son como niños; deben ver y tocar para creer.

Mis niños, su fe está como la de un niño la que comienza a marchar. A la menor contrariedad ustedes caen y sus ojos son fijados sobre este mundo. Comprendan que el Plano de su Padre del Cielo es ordinariamente imprevisible. Él es el Dueño de todo. Les aporta signos, pero hace todo al modo que Él lo desea.

Comprendan mis niños, que ustedes tienen que consolidar su fe porque ustedes olvidan rápidamente las gracias que ustedes recibieron.

Mediten mis niños: en su gran Sabiduría el tiempo de su Padre del Cielo no es el suyo. Sabe lo que es bueno para ustedes en el momento deseado.

Rueguen y rueguen mis niños, porque sólo el Corazón Acogedor de mi Hijo puede acoger todo. En su Corazón vive la Omnipotencia de Amor Puro de su Padre.

Les suplico, mis niños, aprendan de la sencillez de un niño y todo les será concedido. Abandónense como un chico. La confianza que tiene en su padre es sin medida. Si un padre toma a su niño para enseñarle a nadar y lo pone al agua, el niño mira a su padre con confianza. Sabe muy bien que su padre no los dejará solo e irá a ayudarlo. Ustedes pueden hacer todo con un niño. Él les abre los brazos, porque tiene confianza en ustedes. Él está sin defensas, pero tiene confianza.

Aunque algunas veces ustedes sienten que las aguas los sumergen, en su vida, miren a su Padre del Cielo y pídale ayuda. Pídanlen a su Hijo a Jesús venir con su Corazón para acoger en ustedes esta confianza, la confianza de un niño. Un chico no se plantea cuestiones y no se pregunta dentro de él: " ¿ acaso mi padre va a cogerme o no? " Él está convencido de eso; sigue el sentido de su corazón. Rueguen y rueguen mis niños, para reencontrar la confianza de un niño hacia su Padre del Cielo. Él sólo desea prepararles cosas más grandes que Él solo conoce.

Bendigan al Señor con todo su corazón para todo lo que ustedes recibieron y por todas las misas que se celebran sobre la tierra.

Les quiero con todo mi Corazón, mis niños. Yo estoy con ustedes cada día sobre esta tierra. No tengan miedo, cada una de sus oraciones es oída, no importa donde ustedes estén. Continúen sin cesar rezando, como un chico. " Pidan y ustedes recibirán ". (Mt 7,7)

No fijen sus ojos sobre todo lo que los contraria. Qué sus contrariedades sean más bien un punto de apoyo para crecer en las virtudes. Permanezcan con los ojos fijados sobre el Corazón de mi Hijo. Les ayudará a superar todo.

Les bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

65 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Le agradezco con todo mi Corazón por estar ustedes unidos a la Omnipotencia Eucarística de mi Hijo que es su Sostén y su Protección. Mis niños, les suplico, ármensen con Toda la Potencia del Reino de su Padre del Cielo. Ustedes viven un gran combate, y con su propias fuerzas ustedes no podrán llegar allá. Recen con todo su corazón para atraer hacia ustedes, hacia sus familias y hacia todos los pueblos, todas las gracias que son reservadas para ustedes. Su Padre del Cielo les aporta todas las armas de su Reino. No tengan miedo mis niños, ustedes están sostenidos por la gracia.

Unansen al Corazón Acogedor de mi Hijo, a su Omnipotencia Eucarística, a cada uno de las misas que se celebran cada día sobre la tierra y ustedes serán protegidos de las plagas.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia Eucarística sobre esta tierra.

Únansen a todas las misas, mis niños, para recibir las gracias y Divina Luz de los Rayo Eucarísticos de mi Hijo y reúnasen y en oración, formen un Escudo de Protección, de Luz y de Paz, unansen con todos los Rayos Eucarísticos que mi Hijo hace brotar sobre la tierra. Formen un Escudo de Protección, de Luz y de Paz, unansen a todas las misas que se celebran, para encadenar a las fuerzas del mal Estas oraciones, mis niños, son una gran protección contra los asaltos de los demonios.

Actualmente, muchos de mis niños viven un gran combate y necesitan sus oraciones. Necesitan el Corazón de mi Hijo para acogerlos. Muchas almas del purgatorio sufren un gran martirio y un gran arrepentimiento, pero ellas no pueden hacer más nada por ellas mismas, ellas esperan sus oraciones. Recen por ellas, ustedes todos mis corazones orantes.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger sobre todas estas almas tu Omnipotencia de Gracias del Espíritu Santo, tu Omnipotencia de Gracias de Luz que aleja todas las tinieblas. Libéralos de sus cadenas y atráelas en tu Reino eternamente.

Mis niños, ayúdenos a salvar las almas. Les suplico, acojan la Omnipotencia de Amor Puro de mi Hijo. Es su Libertador, su Salvador.

Les suplico, mis niños, hagan saber todas las enseñanzas que les aporté, a través del Corazón Acogedor de mi Hijo. Llevan la Omnipotencia del Espíritu Santo. Cogerán los corazones. Sí, mis niños, estas palabras simples cogerán sus corazones. No tengan miedo, a través de sus sufrimientos y a través de su purificación, muchos volverán a aprender a hacerse " dulce y humildes de corazón " (Mt 11,29) y ellos reconocerán mis obras en la Luz de mi Espíritu Santo. Rueguen y rueguen mis niños, todo se cumple y todo se cumplirá.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger en todo nuestro ser esta constancia de nuestra fe, para que podamos avanzar Contigo y seguirte para cumplir todo lo que deseas para nosotros.

Rueguen y rueguen mis niños, porque los tiempos están próximos donde sus ojos se abrirán y sus orejas oirán.

Hago descender sobre ustedes Toda la Potencia de Bendiciones del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

66 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Le agradezco por estar reunidos y por unirse a mi Hijo en su Eucaristía. Gracias por sostener a estos los niños que marchan por esta Misión. A través de esta misa y a través de la Omnipotencia Eucarística de mi Hijo Jesús Cristo, en este día, las almas de los niños que han sido masacrados han sido atraídas y están unidas con el Reino de su Padre del Cielo. Su tierra esta roja sangre vertida por pequeños inocentes. (Abortados)

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger la sangre de estos pequeños inocentes y unirlas con tu Sangre Preciosa para que el sacrificio de estos niños ayuden a rescatar todos los pecados de este mundo.

Les suplico, mis niños, recen por todos estos pueblos y por todos estos niños con quienes mi adversario se ensaña. Son pobres y sin recursos. Los dirigentes de su país no tienen ningún respeto por la Vida. Hacen de ellos seres hambrientos y sin recursos. Viven el horror antes de morir.

Les suplico, mis niños, agradezcan a Dios su Padre, para todo lo que ustedes tienen, y alábenlo con su corazón para con sus sacerdotes y unidos a todas las misas que se celebran, porque eso es para ustedes una gran Protección contra las tinieblas. Les suplico, mis niños, ustedes tienen la posibilidad de vivir en la opulencia, ustedes recibieron una educación, póngala al servicio de Dios. Todos los dones que ustedes recibieron, póngalos también a su servicio. El Espíritu Santo en ustedes, a menudo brota y de varios modos.

Comprendan que acoger a la gente en su hogar, esto es un don, un don de acogida. Ocuparse de enfermos es también un don del Espíritu Santo, el don del amor y de la compasión. Desarrollen todo lo que el Señor su Dios depositó en ustedes como dones, para el servicio de todos su hermanos y hermanas.

Dios los creó para estar al servicio de su Amor a través de su hermanos y hermanas.

Sé que a veces su vida diaria es muy difícil y usted tienen mucho cansancio y aburrimientos, pero no los detenga esto. El Espíritu Santo en ustedes les ayudará a soportar todo sus cansancios. Vengan reposarse para un tiempo de oración.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger en cada uno de nosotros tu Omnipotencia de Gracias del Espíritu Santo.

¡ Esto es simple! Atraiga sin cesar hacia ustedes la Omnipotencia del Espíritu Santo, a través del Corazón de mi Hijo, y ustedes sentirá la Paz.

Rueguen y rueguen mis niños, por todos estos pueblos que viven en una gran pobreza. Recen y recen por el tercer mundo, por todos ellos, los que viven en los barrios de latas. No tienen nada. No pueden más. Necesitan sus oraciones y las ofrendas de sus misas. Únanlos con la Omnipotencia Eucarística de mi Hijo. Sus gracias aportan siempre ayuda y consuelo.

Para reunir a estos niños en desamparo, su Padre del Cielo les regaló el Corazón Acogedor de su Hijo para esta tierra. Viene para confrontar y para transformar las tinieblas en Luz. Les suplico con todo mi Corazón, mis niños, unan toda esta tierra en el corazón de mi Hijo, para acoger Toda la Potencia de Gracias del Reino de su Padre del Cielo para que su Justicia reine. Mi Hijo es el Vencedor de toda fuerza de las tinieblas. Permanezcan en paz, porque sin esta paz, ustedes perderá su camino.

Alabenlon al Señor con todo su corazón por todo lo que cumplió en este día. Bendíganlon con todo su corazón para todo lo que ustedes reciben.

Los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Todos mis ángeles los acompañan.

Amén

67 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Gracias por estar reunidos en nombre de mi Hijo. Mis niños, su Padre del Cielo escogió a esta pequeña inocente para encender, en el corazón de sus sacerdotes, el Fuego Sagrado de la Eucaristía de su Hijo.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias de Providencia.

Ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para encender el Fuego Sagrado de tu Eucaristía en el corazón de cada uno de tus sacerdotes, para que puedan creer que estás Vivo y activo través de ellos, y para que puedan reconocer la fuerza de su Sacerdocio.

No tengan miedo, las lágrimas de esta niña son sólo amor para cada uno de vosotros. Les suplico, rueguen y rueguen y pidan la abertura de su corazón. Les suplico, no se resistan al Don de su Padre del Cielo para esta humanidad, porque los tiempos presienten, y ustedes necesitan ayuda. Toda la Potencia del Reino de su Padre del Cielo los sostiene en este tiempo de purificación y de gran prueba. ¡ Reflexione mis niños!

Los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Todos mis ángeles los acompañan.

Amén

68 - El 14 de septiembre de 1999

Fiesta de la Cruz Gloriosa

Mensaje de la Virgen María

Les agradezco por haber celebrado esta misa, hoy, en la fiesta de la Cruz Gloriosa de mi Hijo Jesús Cristo. Nuestros Corazones están rellenados de Amor y Alegría, y esta misa es una lluvia de gracias para todas las almas del Purgatorio y para todos los que están unidos, en oración. Mis niños, depositen todas sus indiferencias al pie de la Cruz de mi Hijo, porque el Reinado de su Gloria llegó para todos sus niños.

Comprendan que nada sobre esta tierra, ni el odio de los hombres, ni su corazón endurecido, ni su indiferencias, puede parar la Acción y el Amor de mi Hijo. Su Amor es Puro y transforma todo. Su Misericordia es muy grande, ustedes no puede imaginarlo. El Amor y la Bondad de mi Hijo son inagotables.

Marchen al ejemplo de mi Hijo Jesús Cristo. Es en su corazón que ustedes lo deben consentir. ¿ Por qué dan tanta miseria a querer marchar sólo, a querer hacer todo por ustedes mismo? Un día, ustedes serán apoyados a la pared de su Sabiduría, en sus gran miseria. Esto no puede ser de otro modo porque Él es Dueño de todo. Los creó por Amor, y no hay en absoluto tinieblas para su Amor.

Mis niños, hagan todo en el Amor y su vida se volverá más fáciles.

Señor Jesús, hazme a un apóstol de tu Corazón Acogedor.

Los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

69 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Le agradezco por unirse en oración. Comprendan que es el orgullo y el poder que motivan a las guadañas-profetas. Ellos saben que mis niños necesitan ayuda y se servirán de sus heridas interiores y procurarán manipularlos en vuestros tiempos de pruebas, no los sigan porque su corazón es impuro.

Oración de la Virgen María: ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger en cada uno de nosotros, tus Totales Potencias de Gracias de Discernimiento.

Ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger en cada uno de nosotros, tu Omnipotencia de Gracias del Espíritu Santo.

Ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias que echa todas las tinieblas sobre los pueblos de la tierra. Ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger tu Omnipotencia de Gracias de Liberación. Ven, Señor Jesús, a través de tu Corazón Acogedor, para acoger en nosotros la Verdad de tu Espíritu Santo.

Rueguen y rueguen mis niños. Rueguen el Corazón Acogedor de mi Hijo.

Los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén

70 - Septiembre de 1999

Mensaje de la Virgen María

Yo les agradezco con todo mi Corazón por acoger todo lo que mi Hijo Jesús Cristo desea de ustedes. Comprendan mis niños, que el mismo Pentecostés que se vivió en las bodas de Cana continúa viviéndose hoy en sus vidas. Cuando le dije a mi Hijo: " no tienen más vino ", (Jn 2,3) los discípulos tuvieron fe y todo se cumplió, cuando Yo, María, les dije a los servidores: " haga todo lo que les dirá ", (Jn 2,5) también se apoyaron en la fe y todavía, todo se cumplió. De todo tiempo el Señor hizo brotar sus gracias y en su Misericordia, no deja de querernos. No dejen de creer en su Amor y de tener fe en sus signos.

Hasta la fe de los apóstoles ha sido afirmada por signos. Hubo un milagro y creyeron y ustedes creerán en ustedes a través de todos sus signos porque mi Hijo desea hacer aumentar su fe. La Omnipotencia del Espíritu Santo cogerá sus corazones, ustedes sentirán mucho amor y calor y como los apóstoles, ustedes irán a testimoniar todo lo que ustedes hayan visto y oído. El Corazón Acogedor de mi Hijo es la continuidad de este Pentecostés.

Mis niños se dicen: " no comprendo, pasé a través de esta prueba y yo he podido soportar todo ". Ya olvidaron que habían pedido ayuda y recibieron la gracia de su Padre del Cielo.

¡ Rueguen y rueguen a mis niños!

Los bendigo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén